Crónica J9 - Estado de Alarma.

4ª derrota consecutiva que cierra uno de los peores meses, si no el que más, de los 8 años de historia en F-7. Se habló mucho durante la semana del porqué no levantamos cabeza, y la verdad, hay muchas preguntas que siguen todavía sin respuesta.
El 6-1 de ayer reabre las heridas del 3-9 del último partido, aunque, las sensaciones de uno y otro enfrentamiento, son distintas.
Si el otro día fue un baño, hoy llegamos igualados en la recta final, pero a falta de 500 metros se nos paró el coche. Lo aprovecharon para engordar el resultado.

Acudimos todos al partido excepto Benny e Iván, cuyas ausencia están pasando una factura mayor de la esperada.
Aunque, ligeramente, funcionamos mejor como equipo y armamos la salida con más criterio, nos sigue faltando un punto de instinto delante para llevar peligro ante la portería contraria y generar dudas en el rival. Ningún disparo entre los tres palos en todo el partido a excepción del gol y alguna jugada aislada. Con este panorama es difícil poder competir en igualdad de condiciones.

Aguantamos el envite de la primera parte para irnos 1-0 al descanso. No estábamos siendo demasiado brillantes pero sí algo más sólidos. Otto no estaba todo lo cómodo que le gustaría y cuando pisaban área, nuestras coberturas desde los extremos, Rubén, Chiru y Brais funcionaban bastante bien. El gol vino precedido de un error en el pase de Dani, que sustituyó a Varo en la manija, en un intento de pared con Carid conduciendo una contra perfecta que culminaron casi en el área pequeña sin oposición.

Hablamos en el descanso de corregir cosas, sobre todo en ataque, donde la referencia del único punta, a veces Ozo, a veces Quitos, no conseguían abrir la defensa que vivía tranquila cerca de su área.
A pesar de todo, los 10 min después de la reanudación fueron nuestros mejores momentos. Conseguimos encerrarles un poco a base de posesiones largas y presión en la salida. Trabajamos el empate y finalmente lo conseguimos gracias a un penalti cometido sobre Chiru, reivindicándose los minutos que jugó y siendo uno de los mejores del equipo, transformado por Dani.
Habíamos hecho lo más difícil.
Pero, sin tiempo para saborear el gol, llegó el 2-1, 3 min después, que fue una ostia en la moral colectiva. Nos vinimos abajo. Todo el esfuerzo, teniendo en cuenta la ansiedad que acumulamos por ganar, cayó en saco roto y el equipo se murió. Ya el 3-1, en un error en la salida, fue otro regalo como el del primer gol, lo que hundió todavía más la esperanza si es que remotamente conservábamos alguna.
3 goles más en los min de la basura nos enviaron a la ducha, agravando una crisis de la que no se intuye el final.

Hay que seguir trabajando, no rendirse e intentar coger lo positivo de hoy cuando el partido estaba equilibrado y podía caer de cualquier lado.

Hasta la próxima

Gracias a Dani por la crónica, este mismo es el ganador de la resolución de la foto fantasma... era Chiru !! (ver foto superior)

Tweet