Crónica J2 - Crónica de una muerte anunciada.

Segundo partido del año el del sábado noche contra el Celtic F-7. Otra vez en traviesas.

A la innumerable lista de bajas, hasta 6, se unía el hándicap de jugar sin portero. Iván, además de la ya conocida ausencia de Alex, finalmente no acudió. Sin posibilidad de oxígeno en la banda quedaba la heroica para intentar plantar cara ante un equipo, hasta hoy, desconocido.

El resultado final de 2-6 no deja margen de duda; nos ganaron jugando mejor y estando más acertados de cara a portería. Sólo en la segunda parte y con el 1-5 tuvimos tres seguidas para haber añadido algo de intriga al asunto pero viendo los méritos de unos y otros, haber conseguido algo positivo no hubiese sido justo. Ellos también perdonaron mucho.

Empezamos sin tener las ideas claras, sin saber si jugábamos dos, tres atrás o mi abuela de central. Beni cogió el centro, Brais quería el enganche, Quitos se movía por arriba y Javi defendía como podía la portería. Ellos tenían el balón y nosotros la esperanza.
Hasta que llegó el o-1. Por toda la escuadra y desde fuera del área.
El gran problema que se nos planteaba estaba siendo la gran distancia que había entre todos, sólo cuando nos juntábamos en el centro conseguíamos frenar algo su salida. Ante nuestro argumento, lo solucionaban con constantes diagonales a los puntas que se movían bien arriba y se dejaba caer mucho a las bandas. Daban la pausa necesaria para la llegada de dos efectivos de segunda línea que ofrecían posición de remate. Vamos, lo que no hicimos en todo el partido.

El 0-3 al descanso nos nos permitía más margen de error; Ozo, que estuvo a punto de conseguir, todavía en la primera parte, el 1-3 en una acción dentro del área pequeña que el portero desbarató, relevó a Javi en el arco y salimos con la intención de, por lo menos, mejorar el papel hasta ese momento. Tendría dos intervenciones de mucho mérito que salvaron dos goles.
Pero ya en el minuto 4 de la reanudación nos metieron el 0-4 que firmó nuestra defunción.

Al final de la primera parte, Carid y Brais habían intercambiado sus posiciones y el equipo había notado la mejoría; nuestro todo-terreno generaba algo de inquietud con sus clásicas arrancadas tipo slalom. Pero el que conseguiría, en un contragolpe, hacer el 1-4 y acortar distancias sería el propio Brais. Primero del año para el hijo pródigo. Jugada de fuerza y velocidad donde encara en vertical recogiendo la bola en medio campo y yéndose de todos para de puntera al borde del área colocarla abajo imposible para el portero.
Pero como a perro flaco todo son pulgas
ni siquiera pudimos celebrarlo. Después del saque de centro en tres toques y gran jugada por la banda con centro al punto de penalti, anotaron el 1-5. Bonita triangulación.

Ya con un Celtic jugando con el marcador, fue a partir de aquí donde tuvimos los mejores minutos con las tres ocasiones seguidas a las que hacía referencia al comienzo y que se quedaron en la misma línea; una de Javi, otra de Rubén y otra de Quitos. Lo que pudo ser y no fue. Nuestro 10, un poco ansioso toda la noche, se desquiciaba hasta la saciedad. Ya llegará.
Javi lo siguió intentando. De cabeza la mandó al travesaño, para, finalmente, después del 1-6, anotar su tanto y hacer el definitivo 2-6. Jugada por la banda de Carid, que se la coló al portero ante la salida y cuando ya entraba, Pipo la remachó. Como diría Montes, egoísta¡¡¡¡

Fue bonito mientras duró, aunque no duró mucho.

Esperemos que el próximo fin de semana las cosas pinten mejor y podamos conseguir la primera victoria.

Buena semana

Gracias Dani... hasta las crónicas epitaficas se te dan bien... :-)

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